Todo el mundo conoce las Gildas y sabe cuáles son esos ingredientes tan típicos que la hacen única: la aceituna, la Anchoa del Cantábrico del País Vasco y la Piparra. Todo ello preparado en un palo de brocheta y con el toque final de un buen chorro de aceite de oliva virgen extra. Uno de los mejores aperitivos, sin duda.

Pero cuando se juntan la creatividad y la innovación en la cocina es cuando se consiguen platos de alto nivel o, en este caso, pintxos. La Gilda se conoce desde hace muchos años por su originalidad y por su gran sabor, pero hay quienes no consiguen disfrutarlas al máximo por alguno de sus ingredientes.

Por eso, al ser un pintxo que permite casi cualquier cambio, puede elaborarse al gusto del consumidor. Es decir, si hay alguien que no le gusta la Anchoa del Cantábrico del País Vasco puede disfrutar de otra Gilda que no lleve este producto. Del mismo modo que una Gilda puede no llevar Piparra o aceituna.

También es cierto que la Anchoa del Cantábrico del País Vasco es un ingrediente casi esencial en este aperitivo, aporta un gran sabor y encaja muy bien con el resto de ingredientes. Es por eso que la gran mayoría de gildas que vemos en los bares la llevan.

Además, la Anchoa del Cantábrico del País Vasco también podemos verla de dos maneras diferentes: con la anchoa en vinagre (estará más blanca) o en salazón (como la conocemos, en color marrón). De esta manera, es el consumidor el que elige la que más le gusta.

De hecho, hay bares en los que sus únicos pintxos son las Gildas y que, por cierto,  tiene mucho éxito. En estos establecimientos pides la bebida y las gildas y es el camarero el que te las sirve en un plato acompañado de unas rebanadas de pan para que las disfrutes. Y, algunos de estos bares tienen más de 15 tipos de gildas.

¿Te gustaría visitar esos bares?